20-11-2017 ~ por
María Malgor Coussirat
Le hicimos una breve entrevista a una de las grandes representantes de la moda argentina, para que puedan conocerla más.
Le hicimos una breve entrevista a una de las grandes representantes de la moda argentina, para que puedan conocerla más.
Cada vez que me contacto con Ana sucede lo mismo, la respuesta es inmediata, incluso para decir que no puede acceder a algo que le pida. Su calidez al hablar, y al escribir, es una característica innegable. Siempre se refiere con términos cariñosos y afectuosos a las personas, por lo que resulta muy amable interactuar con ella.
Encuentro interesante su palabra, aunque sea para una breve entrevista de presentación a nuestros lectores, porque en el mundo de la moda su voz suena cada vez más fuerte y se volvió necesaria su mirada en la industria.
Su compromiso es incuestionable y puede verse reflejado en su visión de la mujer en el mundo, que va mucho más allá de la construcción de belleza utilitaria.
Acá les presentamos un breve cuestionario para que entiendan ¿de quién se habla tanto en la industria?
Maria Malgor Coussirat: Si tuvieras que presentarte ante las mendocinas con 5 palabras ¿Cuáles elegirías?
AT: Soy Ana Torrejón, periodista y docente. Gracias por recibirme.
MMC: ¿Naciste en Puerto Madryn y fuiste a vivir a Buenos Aires? ¿ Cuántos años tenías? ¿Qué te llevó a permanecer en ella?
AT: Mi familia se mudó de Madryn a Buenos Aires durante mi adolescencia. El motivo fue el trabajo de mi papá y luego, nos quedamos. Nunca perdimos la vinculación con nuestra ciudad, vamos y venimos y jamás pasa un verano sin estar ahí, en la Península, en Madryn. La tierra es el lenguaje de la infancia, de los recuerdos, del vínculo más primitivo y trascendente.
MMC: ¿Cómo empezaste en la industria de la moda?
AT: No sé cómo ni porqué empecé, lo que sé es que era un lenguaje constitutivo, un motivo que hablaba de mi manera de construir presencia en el mundo y dentro de las cosas. Me recuerdo haciendo mis vestidos, disfrazando a amigas y amigos, armando performances y después, escribiendo sobre moda.
El principio fue en Página 12, en el Suplemento de Cultura y todavía los artículos tienen vigencia. Creo que fui osada, atrevida pero que sigo pensando lo mismo de muchas cosas.
MMC: Tu trayectoria en las revista de moda fue prolífico, pero llegar a Harper´s Bazaar debió ser la frutilla del postre ¿Cómo lo viviste?
AT: Ninguna vida tiene como objetivo llegar a algo. (destacar en el texto)
Cada uno de mis trabajos me permitió armar grupos, aprender de los otros, crear colectivamente. La primera revista que dirigí fue “Claudia”, en el 91.
Del 94 al 2007 estuve al frente de “Elle”, “Elle Decoración” y todos los one shots derivados, como viajes, novias, guías de estilo.
Mi período Bazaar fue de seis años y medio y resultó un gran desafío con final imprevisto. Televisa decidió discontinuar todas las redacciones y de la noche a la mañana, seis revistas pasaron a hacerse en México y distribuirse en Argentina. Una pena. De todos modos, ha sido una maravillosa fase y la recuerdo con todo mi amor.
MMC: ¿Cómo es dirigir una revista en Argentina donde los recursos escasean?
AT: Hacer una buena revista no es una cuestión de dinero, es una cuestión de talentos.
En cada una de las tres revistas que dirigí me acompañaron las personas más profesionales, inspiradas y creativas con las que pude contactarme. Hay infinitas más a lo largo y a lo ancho de la Argentina. Por eso digo que lo mejor es el nosotros, hacer una primera persona del plural y que la rueda gire!
MMC: ¿Qué proyectos nuevos tenés? ¿Cómo fue empezar de nuevo?
AT: Dicen que la culpa la tiene mi signo, Sagitario, pero jamás pude hacer una sola cosa. Hoy estoy dedicada a la consultoría de marcas y empresas, a la docencia, a mi web y preparando un nuevo proyecto, algo que me ilusiona mucho pero no puedo contar.
MMC: ¿Quién te inspira?
AT: Me inspiran las personas apasionadas, las que dicen la verdad, las que luchan por los sueños contra viento y marea, las que hacen de la decencia un estilo de vida, las diversas.
MMC: ¿En quién te querés convertir?
AT: Me gustaría llegar a ser la mejor versión de mi misma.
MMC: Vemos mucho a “Ana en los bares”¿Por qué?
AT: No pierdo el tiempo, lo encuentro en un bar, a solas, tomando un café frente a la ventana. Eso es lujo. Voy, pienso, escribo y salgo a la vida.
MMC:”Ana de negro” es una marca registrada ¿Qué pasó con vos y los colores?
AT: Tengo demasiados estímulos a mi alrededor, preciso andar liviana.
Vestida de negro me transformo en un gesto, una línea. (destacar en el texto)
El pelo corto despeja las ideas.
Y otra cosa, parte de mi familia viene de la meseta castellana y se radicó en la meseta patagónica, somos así, austeros.
MMC: ¿Qué te gustaría que se dijera de vos en unos años?
AT: Ojalá alguien diga que le dí una mano, que fui una buena editora, que pudimos ser amigos, que abrí alguna puerta, que nos divertimos mucho y que confió en mí.
MMC: ¿Qué te gustaría decir de vos en unos años?
AT: Que estoy acá, en la vida, para ser un instrumento.
MMC: ¿Hay algo que quieras contarnos que no te haya preguntado?
AT: Bueno, que me gusta mucho caminar, leer todos los días, ver árboles y que puedo charlar con conocidos y desconocidos. No hay nada más perfecto que la vida simple.