Voy a empezar diciendo que es desde la más profunda, dolorosa, recurrente pero sumamente enriquecedora experiencia propia que escribo esta alertadora nota.

A todas aquellas que como yo buscan siempre la manera de justificar que el infeliz en cuestión no sea capaz de mandar ni un mísero “Hola” por Whattsapp, ¡a despertar se ha dicho!, ¡a ver la realidad y a otra cosa mariposa!

Para hacer más gráfica la situación: han 3 pasado días, una semana, un mes desde que lo cruzamos por última vez y aún no aparece. ¿Lo atropelló un tren? ¿Lo secuestraron los extraterrestres? Nada de eso, pero igualmente sacamos lo mejor de nuestra imaginación y buscamos autoconvencernos de las poco probables pero esperanzadoras razones por las que nuestro “candidato perfecto” aún no escribió.

A continuación nuestras 3 mejores mentiras:

1. TIENE MUCHO TRABAJO. Esta es la típica: “Pobre, esta con un montón de cosas en la cabeza, no tiene tiempo ni de respirar”. ¡No seamos ilusas!, para el asado de los miércoles y el partido de los jueves seguramente tiempo no le va a faltar. Aunque sea debería mandar un ¿cómo estas? para darte a entender que le interesás.

2. CREE QUE ESTOY CON ALGUIEN. Si es así, para enterarse no hace falta más que una invitación y la consecuente “No puedo, estoy saliendo con otra persona”. O, si eso le parece demasiado, un simple ¿qué es de tu vida? ¿estás con alguien? lo hará sacarse la duda de inmediato. Moraleja: si no te hizo ninguna de estas dos preguntas y ni siquiera mandó un emoticón, una estatua de mármol sería mejor opción.

3. DEBE PENSAR QUE NO ME INTERESA. “La otra vez ni lo miré, lo salude re mal y no le dije nada…es obvio que cree que no estoy ni ahí”… Puede que hayas sido más amarga que payaso de feria pero si le gustás, ni aunque le prestes la misma atención que a un poste de luz se dará por vencido. Además, no te olvides que son hijos del rigor: MIENTRAS MÁS DIFÍCIL MEJOR.

Resumiendo:¡SI UN HOMBRE TE QUIERE VER TE VA A BUSCAR! Nada de excusas, ni complicaciones. Llueve, truene o se caiga el mundo, cuando un hombre quiere estar con una mujer moverá cielo y tierra hasta que suceda. Si eso no está pasando amigas, es porque lamentablemente no le interesamos.

¡Pero a no desesperar! Si ya van por el quinto kilo de helado, recuerden: Sí, es un garrón, sí, otra vez sopa, pero al menos no perderemos más el tiempo en algo que NUNCA va a pasar y con alguien que, claramente, no sabría reconocer una diosa del olimpo como nosotras ni aunque su vida dependiera de ello.

Como dicen las mejores amigas ¡EL SE LO PIERDE! (Y esta, mis queridas, es la pura y única verdad: ¡CREANLA!)

Fotos: pinterest/instagram

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